Recorrido por la serie fotográfica Ecos de Fran Valdivieso. Bruno Bresani

Bruno Bresani, artista visual mexicano, nos comparte su reflexión en torno de la serie fotográfica Ecos de Fran Valdivieso, que parcialmente se presentará en el Salón de la plástica mexicana en diciembre de este año.

 

 

El hombre vive en un mundo en el que cada ocurrencia está cargada con ecos y reminiscencias de lo que ha ocurrido antes. Cada acontecimiento es un recordatorio.

John Dewey

Cada acto, cada momento, cada emoción es una reminiscencia de lo que ha pasado, de los actos de opresión, frustración, alegría y gozo. En la serie fotográfica Ecos Fran Valdivieso nos lleva a los rincones de estas opresiones, a los paisajes de sombras con cuerpos ocultos esperando la catástrofe, son las heridas que se comparten entre madre e hijo, los rencores se filtran en el inconsciente de la piel, son los sudores del miedo entre las penumbras, en esta serie Valdivieso se funde con la luz, con el vientre que se desvanece, los recuerdos son espectros que invaden las esquinas de su intimidad, la casa es ese refugio que esta rodeado, es la guarida a las miradas cegadas.

Charles Bukowski dijo: «Lo que importa, es lo bien que camines entre las llamas».

Valdivieso le contesta a Bukoswski:

“Pero toda causa tiene efectos y si se camina por algún tiempo entre las llamas me resulta imposible concebir que el fuego no te consuma parcialmente y en gran medida.

Ante su soltería, mi madre tuvo que reprimir su proceso de embarazo. Y hasta dónde le fue posible vendó y fajó su vientre para ocultarlo. Una vez descubierta, sobrevino el tratamiento que fue básicamente un infierno psicológico, un acto violento dentro del seno de una familia conservadora, religiosa, machista que la agobio y la oprimió bajo un ambiente de menos precio e intimidación que generó culpas, miedo, baja autoestima y otros tantos sentimientos negativos. Aún después de parir, mi madre tuvo que someterse a las imposiciones morales y a los preceptos dictados por la familia.

He buscado recolectar pedacitos de memoria, rescatarlos de la nada y transcribirlos de algún modo en imágenes. Desenmarañando algunos nudos emocionales y psicológicos.

¿Será posible que la manera en que las personas hemos sido paridas influye en nuestro destino de un modo determinante?

¿Será probable que la sensación de tener un lugar en el mundo este estrechamente ligado al lugar que un ser ocupa durante los nueve meses de gestación?”