Obra ganadora del Primer Concurso de Pigmeísmos junio 2016

liliana-savoiaOriginaria de El Rosario, Argentina, Liliana Savoia obtuvo el premio del primer concurso de Pigmeísmos «Agustín Monsreal». Publicamos sus textos y también las minificciones sugeridas por el jurado y la convocatoria del segundo concurso de pigmeísmos «Agustín Monsreal» que cerrará el 15 de julio próximo.

 

 

 

Liliana Savoia. Argentina
Nace en Rosario, Argentina, en 1953, lugar donde radica y desarrolla su obra.
Ha recibido numerosos  premios nacionales e internacionales en el campo de la literatura y las artes plásticas.
Publicó:  «Rozando el alma» Poesías 2008- «Sueños sin despertares  Microrelatos 2009. «Masticables» Poemas  2010-«Al sur del Alma», novela, 2011- «Recuerdos fragmentales», relatos, 2011- Aproximaciones a un ensayo sobre Cortázar, 2011 «Parir una agonía», cuentos, 2012- «Hilvanes de cemento», poesía, 2012.  «Detrás del terraplén» Novela, 2013- «De elogios y otras yerbas»  Poesías– Argentina-2014
«El corral de los vicios»- Poesías – Argentina- 2014 El revés de la seda – Poesías » 2014-La música del Agua» Novela 2015

Obra ganadora:

Ángeles
Una vinculación inevitable une a las alas y  los ángeles, aunque los he visto sin alas,. Los he visto, digo, a veces, caminar con la ropa sucia y desgastada, o eso me pareció.

Sutilezas
Salió del penthouse balanceando la cartera Louis Vuitton. Wall Street la deslumbraba. Con Luego iría a ver a su abuelita con los Dow Jones
Caperucita sabía manejarse sin la ayuda del leñador.

De bares y testigo
Las patas  se miraban sin conocerse. El murmullo las internaba en su mundo recto, matemático, gastado de huesos y de risas.
La cartera, sobre la silla de al lado, fue la única testigo.

Cuerpo de papel
El cuerpo de Franco mutó. Las que  antes fueran sus  manos,  son palabras que dicen mano. No tiene ojos, sólo cuencas que contienen letras que dicen: «tenía acceso a los colores.

Fruto de la palabra
Puede aunque no debe, alargar su tiempo entre frases y palabras, porque el mundo sin escribir, en tanto decir mundo es decir  vida,  sería una forma tácita de solo esperar la muerte.

Palabras en la fuente
El relator despierta tratando de reunir las piezas de sus párrafos. La levedad de la calma se instala  en cada renglón.
Visión y visionario se funden en la historia.

Dirección electrónica: savoia@gmail.com

***

 

El jurado sugirió además que se publiquen en La Otra, bajo consentimiento de los autores, los pigmeísmos de los siguientes concursantes.

 

NO DIGAS y REVOLUCIÓN, Juan Pablo Goñi Capurro. Argentina
AYOTZINAPA y COLECCIÓN,, Gabriel Ramos. México
PROMESA DIVINA y LA OTRA MANZANA, Tomás Castro Burdiez. República Dominicana
DUPLICIDAD y TRUNCO, Plácido Romero. España.
FINAL INFELIZ, Marylena Cambarieri. Argentina
SOMBRA y ESPEJOS, Malena Colantonio. Argentina
SENTÍA UNA PROFUNDA SOLEDAD y ANTE EL PRECIPICIO, Juan Carlos Gallegos.
HECHIZO, Adrián Rodríguez Tanche.
OSADÍA y PENÉLOPE, Melissa Limón
LA PIEZA, Alejandro César Álvarez
USTED, Luis A. Chávez
RETROSPECTIVA, Francisco Javier Larios
TODO SE PAGA, Dina Grijalva 
MAR ADENTRO, Pedro A Estrada.

 

Juan Pablo Goñi Capurro. Argentina

No digas…
Ofendida, se bajó del auto sin besarlo y jurando no volver a hacerlo. Seis horas más tarde rompió su juramento. Lo encontró frío. Desventajas de la morgue.

Revolución
La revolución triunfó. Los revolucionarios estamos planeando otra.

 

Gabriel Ramos. Ciudad de México

Ayotzinapa
Cada noche veo a mis padres desesperados. Les hablo y no me contestan, solo se miran entre ellos mientras los perros del vecindario me ladran. Después se van llorando por el mismo camino.

Colección
¿Para qué quieres tanto cuchillo Jack?

 

Tomás Castro Burdiez. República Dominicana.

PROMESA DIVINA
Después que Jesús pronunció el sermón de las Siete Palabras, pensó: si esto funciona antes de dos mil años, haré el milagro del microcuento.  

LA OTRA MANZANA
Cuando Eva le dio la vuelta a la manzana de Nueva York. Dios le dijo; no tengo poder sobre esa manzana podrida: ahí te vas a joder.

 

Plácido Romero. España

Duplicidad
Para multiplicar sus oportunidades, Cenicienta dejó olvidados los dos zapatos en las escaleras de palacio.

Trunco
Cuando el editor terminó de leer mi libro, me recomendó que no intentara tener un hijo ni plantar un árbol.

 

Marylena Cambarieri. Argentina

Final infeliz
Ya no había esperanzas para su relación: habían empezado a quererse realmente.

 

Malena Colantonio. Argentina

SOMBRA
Desde chica decía ver un fantasma, hasta que se le ocurrió apagar la luz.

ESPEJOS

Cansado, abandoné todos los mandatos. Pero fue ridículo que mi gato resolviera lo mismo, dormía sobre sus patas traseras, piaba por las mañanas y, cuando abrí la ventana, decidió volar.

 

 

Juan Carlos Gallegos. México

Sentía una profunda soledad
Su único consuelo era ir al cine, sola, a mirarse en la pantalla.

Ante el precipicio
No se atrevía a dar el paso final. Sabía que tenía toda la vida por detrás.

 

Adrián Rodríguez Tonche

Hechizo
El espejo le dijo: ¡Maligna, oscura eres y en bombilla te convertirás!

 

Melissa Limón. México
OSADÍA
Sin importarle su suerte, se levantó con el pie izquierdo.

PENÉLOPE
Después de su embarazo psicológico, dio a luz a su hijo imaginario.

 

Alejandro César Alvarez. Noruega.

La Pieza
A la blanca y prístina dama se la comía un peón
mientras el rey miraba a las negras.

 

Luis A. Chávez

USTED
Se encuentra en un ambiente de espanto, intuye inminentes peligros y busca una salida: voltea hacia arriba pero no me compadezco. Aquí el que manda soy yo.

 

Francisco Javier Larios. Michoacán, México.
RETROSPECTIVA
El libro se sueña árbol, y al despertar todas sus hojas son verdes.

 

Dina Grijalva, Culiacán, México

Todo se paga
En el mundo del sicariato ninguna muerte es un acto gratuito.
Pedro Arturo Estrada. Colombia
MAR ADENTRO
Se los advertí: "Cierren bien grifos de la cocina". Ahora es demasiado tarde para todos, y el viento arrecia sobre las cortinas llevándose la casa y con ella nuestras vidas, mar adentro.

 

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Un comentario

  1. Federico Ganha Johnson