Presentación de La Otra-Gaceta 45

Juan Gelman y su lucha por la memoria
Hugo Gutiérrez Vega. Premio Nacional de Periodismo
Los que partieron
José Ángel Leyva
jose-angel-leyvaMéxico lindo y herido: El crimen organizado, el Estado disfuncional, la justicia baldada, la sociedad enferma, la economía informal, y un vecino predador y voraz que nos vende armas, consume drogas y se queda con las jugosas ganancias de la industria de la muerte.

 

Tiene razón Pablo González Casanova, el cambio comienza con el reconocimiento y los nombres de la realidad; esta que vivimos y amenaza con devorarnos tiene los propios y no son lo que suelen pronunciar los medios ni los políticos buscachambas. La responsabilidad intelectual  ¿responderá a esta urgencia, a esta exigencia? ¿A qué le tenemos miedo?

Gelman y Leyva
Durante el mes de noviembre de este año, el diario El País publicó notas difamatorias contra el poeta argentino Juan Gelman quien demanda que se localicen los restos de su nuera. Recordemos que 30 años después de su asesinato, su hija, nacida en cautiverio y dada en adopción a un ex policía, fue identificada gracias a la porfía y a la búsqueda de su abuelo, quien jamás desistió de su empeño, no obstante los numerosos obstáculos y argumentos para que dejara en el olvido un objetivo que parecía imposible. Gelman nos dio una lección de coherencia y de esperanza, sin pretender dar lección alguna, respondiendo a su propia ética y a su voluntad de exigir la verdad de los hechos.

Gelman y su nieta Macarena se reunieron en Quito, en la Corte Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, a revisar el caso y a exigirle al gobierno de Uruguay que dé marcha atrás a la Ley de Caducidad, misma que pondría fin a la búsqueda del cadáver de la madre biológica de Macarena. Las notas periodísticas mencionadas acusan a Gelman de cerrazón y de pretender una indemnización de dos millones de dólares por parte del gobierno uruguayo –está en todo su derecho de exigirla, pero no es factor de negociación ni su argumento–. Con ello buscan desvirtuar la lucha del poeta por mantener viva la memoria de sus hijos Marcelo Gelman y María Claudia García, desaparecidos en 1976, e impedir que una Ley de Caducidad dé carpetazo a éstos y numerosos crímenes cometidos por la dictadura militar.

La respuesta de Gelman publicada en El País fue la siguiente:
Las patas cortas

 

En su edición de ayer, 20 de noviembre, y bajo el antetítulo “Indemnización” y el título “Buscan negociar con Gelman”, el diario El País de Montevideo publicó una información falsa y calumniosa que atribuye a “fuentes oficiales”. Un diario que, como El País, se precia de ser serio, debería verificar la veracidad de sus informadores antes de publicar bajezas.
          Juan Gelman

Días antes, Gelman me hacía llegar estas líneas que aunque personales respondían a la indignación de mucha gente por la calumnia y por ello la posibilidad de citarlas aquí.

“Querido José Ángel, la información de El País es una mentira total. No hay negociaciones de ninguna índole con el gobierno uruguayo. Los blancos del Partido Nacional, dueños de ese diario, no quieren saber nada con la anulación de la Ley de Caducidad. Sus razones tendrán. Se ha iniciado una campaña sucia contra mi nieta y contra mí, pues muy probablemente la Corte Interamericana de Derechos Humanos conminará al estado uruguayo a anular esa ley.

Juan”

Por si alguien abrigó alguna duda con respecto a la integridad de Gelman y su nieta, puede desecharla. No hay dinero que compre la dignidad y la determinación de resistir contra el olvido.

Hugo Gutiérrez
Hugo Gutiérrez Vega recibió el Premio Homenaje Fernando Benítez por su labor periodística al frente de uno de los pocos suplementos culturales que sobreviven en este lacerado país, donde el 2010 ha sido campo de guerra y escenario de suntuosos festejos del bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución mexicanas. Entre balas y juegos pirotécnicos, La Jornada Semanal defiende la palabra y la cultura como instrumentos de conciencia en un país que es cada vez menos país, o la caricatura de la nación donde nos vemos reflejados. Hugo, en su “Bazar de asombros”, exhibe otra mirada a veces nostálgica y a veces descarnada de esta cultura. Felicidades, Hugo.

 

Finalmente, ya que este 2010 se va entre balazos y juegos pirotécnicos, pensemos en los muertos que nos dejan no sólo grata memoria sino obras literarias: José Saramago, Carlos Monsiváis, Carlos Montemayor, Alí Chumacero, Friedrich Katz, Germán Dehesa, Antonio Alatorre. Los seguiremos leyendo.

Juan Gelman-Mara Lamadrid-Hugo Gutiérrez Vega

 

 

3 comentarios

  1. María Elena Matadamas Jiménez